26 febrero, 2008

Falso Candidato

Y una vez más Lucy ha vuelto al ruedo luego de la desdichada historia que se ha diluído con un (intento de) LoveBoy totalmente errático.
Por lo tanto, salir con amigos es parte del plan semanal, como muchos de ustedes hacen. Lucy también.
Salida con amigos varones, siempre implica que se incluyan más varones (los amigos del amigo) y entonces, termina sucediendo en varias ocasiones que son unos cuántos nenes y Lucy, que salen de parranda a romper la noche. (?)
Lucy encantadísima, pueden imaginarlo.
Y no es la primera vez que pasa algo así como "El amigo de fulano, quiere saber si salís este finde" o, los más arriesgados "Me pidió tu teléfono". Son pocas las veces que confirmo un Ok para que se habilite algo de ese orden. Porque claro, Lucy mira muy bien y si nadie llamó su atención esa nuit, no candidatea para un "a solas". (en el 89% de los casos, claro)
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Aquella noche, alguien llamó mi atención pero estaba en otro plan y no quería modificarlo. Hay momentos que se dejan pasar, sí y no está mal de vez en cuando.
Pero hubo miradas, fuertes. Roces. Pequeñas conversaciones de momento y absolutamente breves como cuando hay música muy fuerte alrededor y no se quiere amanecer afónica al otro día por un boy 6 puntos. Nah. No es necesario, terminemos con eso de paso.
Cuestión, concluyó la nuit y se largó la week.
El domingo, mientras la semana quería largarse (pero no se largaba), mi amigo me llama para decirme que el fulano se había comunicado para saber about me. Ahí comprobé que no estaba afónica y entonces, valía la pena una charla con menor volumen alrededor. Le dije que le pase mi celu. Así fue. Aunque mi amigo se sorprendió de una forma que nunca ví anteriormente y eso me dejó algo confundida. Whatever.
El fulanito me llamó, hablamos y combinamos, así de simple. The simple Life. (gracias Paris y Nicole)
Y llegó la cita.
Manicure, belleza de pies (como siempre), vestidita cool tranquila, ropa interior composé (nunca se sabe, girls), perfume elegido especialmente para una cita veremos-qué-pasa-no-se-si-me-gusta-yet, maquillaje suave, cartera completa y taxi.
Y ahí entré, me hizo una seña (parece que estaba ansioso el fulano dado que tuvo que haber llegado con bastante antelación para tomarse un café y medio coctel) y, con cara de plena perplejidad avancé (derecha Lucy, derecha) tratando de disimular (y no) mi cara de espanto.
No era el fulano que yo creía. Era otro.
¿Cómo salir de una situación así sabiendo que nos va a mirar el escote y los labios mientras hablamos durante TODA la cita, el sujeto equivocado? El falso candidato. El que no queríamos.
Pedí un Martini Dry, lo bebí de 3 sorbos, salí a fumar un cigarro y, al entrar, confesé: Sos mi falso candidato, fulano.
¿Qué sucedió?
Le ofrecí invitarle la siguiente ronda (culpable por la desdicha del fulano), me dijo que no y me pidió dejar que vaya a su cuenta. Así fue. Segundo Martini y me despedí sin más. Taxi, grité y regresé alone.
Hay noches que lo mejor que podemos hacer es dejarlas atrás. Ésta no ha sido la excepción.
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15 febrero, 2008

El Monotema

A decir verdad, no tenía en mis planes escribir about el Monotema. Llegado este momento del día (algo así como el intermedio entre el atardecer y la noche) sentí que era necesario postear y sí, hablar sobre el monotema.
Comentarios de amigos, charlas de desconocidos, posteos de algunos blogs, publicidades, gente que trabaja con uno, todo apuntando a: San Valentín.

Personalmente no tengo ninguna postura about San Valentín's Day. Es algo a lo que no le doy demasiada importancia y que, debo reconocer, cuando estuve muy enamorada aprecié de una forma muy peculiar una flor de cobre que me hizo con sus propias manos Ringo para dicha fecha, pero nunca me dijo: Felíz Día, Lucy. Nah. Simplemente me la dio. Y aquí sigue, entre mis libros, en la biblioteca del living. Quien observa mis libros de dicha biblioteca (porque hay otra en la habitación) y agudiza la mirada, la puede ver. Aún así, no viene al caso.

He quedado algo sorprendida con la actitud que me encontré este año frente al día de San Valentín. Muchísima gente indignada, molesta, enojada y hasta sintiéndose invadida por dicha fecha.
Pienso en que si nos ponemos a jugar con las analogías, un judío podría sentirse del mismo modo cuando los católicos festejan el nacimiento de Cristo conocido como Navidad. O un hermano cuando le festejan el cumpleaños al otro. Tal vez una amiga soltera cuando su amiga festeja el aniversario de casada. Y no le encuentro la vuelta y, mucho menos el sentido.

Todos los seres humanos necesitamos amor. Cualquier persona siente deseos de estar acompañada y no pasar su vida - y con esto me refiero a las cosas buenas que le suceden y las malas - en soledad.
Los que pudimos conocer aquello que se siente cuando se tiene una relación de pareja en la que hay amor genuino, sabemos que es un momento pleno y maravilloso.
¿Por qué indignarse cuando otros pueden recorrer ese camino y nosotros no?

A Lucy la hace muy felíz que la gente se ame, se quiera y se enamore. Incluso, varias de las parejas que ayer festejaron, fueron producto de la ayuda de Lucy. Porque los presentó, porque los cruzó, porque los invitó.
Que muchos de nosotros no hayamos podido hacer buenas elecciones de objetos (sujetos) de amor, que hayamos descuidado a nuestras parejas, que hayamos mentido, que hayamos omitido, que se haya acabado el amor, que hayamos traicionado o que hayamos fracasado, no invalida que otros se sientan lo suficientemente felices como para salir a festejar que se encontraron, se quieren y estan juntos (y que no fracasan como uno)

Come on, todos queremos eso. Pero, mientras muchos sigan sin hacerse cargo, supongo que seguiré escuchando tanto rechazo y tanto tedio apuntando al Día de los Enamorados, porque claro, este año nos ha tocado estar afuera y no tener ningún motivo para festejar.
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ALL YOU NEED IS LOVE

"La casa estaba en orden y no encontré motivo, me equivoqué de ruta, señal que te he perdido. No me opongo, si ese es el destino. El horizonte no es el chino, te voy a buscar, no te encuentro, será que me he perdido, señal que te he perdido."

07 febrero, 2008

Tengo defectos. I Know.

Resulta que el calor ya se sabe que es terrible y no puedo soportarlo ni medio segundo por lo que soy adicta al aire acondicionado.
Tengo la luck de tener aire en todos los sitios que más frecuento, empezando por mi centro energético, mi campo magnético: Mi casa.
Y me gusta ponerlo bien fuerte. Mucho frío. Estar un poco morada de tanto frío. Acudir a las frazadas y acolchados. Me hace felíz.
Y así, paso mis días en verano. Con sweters y tomando sopas. (porque otra cosa que adoro es la sopa y no puedo esperar una temporada entera para tomar mis ricas sopas de verduras)
He aquí la cuestión. Sopa.
Hace varios días moría por una super sopa de verduras. Casera. Mía. Compré verduras para sopa, agarré un olla de esas enorrrrmes que nunca se para qué hay que usar (porque es muy big) y, en mi afán de tomar mucha sopa por varios días y noches, preparé una gran olla gran de sopa de verduras. Caldo, sopa, verduras cortadas pequeñas. Super sano. Muy nice mi sopa. El aroma era majestuoso.
Más tarde, me dispuse a tomar sopa de verduras, un re plato sopero y quedé contenta, tapada hasta la médula con frazada de invierno y entrando en sueño REM.
Fue tan placentero que llegué (por segundos nada más) a preguntarle al cosmos: ¿Qué más puedo pedirle a la vida?
- No se hagan esa pregunta cuando la están pasando bien porque apenas terminan de formularla, vienen a la cabeza 349 cosas que, efectivamente, podemos perdirle a la vida. -Whatever. Dormía.
Al otro día salí de mi casa con los minutos contados y no reparé ni en el orden de mi home ni en nada. Y quedó, allí muy alone, the big olla, en la cocina. Tapada, eso sí.
Pasé todo el día fuera de casa y por la noche me invitaron a cenar a Nemo (imposible negarme porque está en mi ranking de lugares favoritos e innamovibles). Llegué tarde, cansadísima y me fui derecho a la cama. La sopa sigue en la cocina y, para ser bien específica, sobre una de las hornallas (apagadas, claro)
Llegaba la mañana y me desperté contra reloj. Salí disparada. Terminé mis actividades tarde y me fui a casa de amigos porque teníamos partido de TEG. Se hizo muy tarde y llegando a mi hogar alrededor de las 4 no pude hacer otra cosa más que correr a la cama para aprovechar cada segundo de lo poco que iba a descansar. Me entregué a mi aposento.
Así, se sucedieron más mañanas y muchas noches en las que por diversas causas, no volvía a mi hogar o regresaba muy tarde. Y pasó el tiempo y la olla, la sopa, las verduras y la hornalla comenzaron a expresarse.
Un día, abro la puerta y siento un olor asqueroso (eso jamás sucede en mi campo magnético, soy obsesiva con los olorcitos) y no supe hasta cuándo podía soportarlo. No sabía de dónde provenía hasta que, mientras me acercaba a la causa de semejante aroma, vino la idea hacia mí: La Sopa. My God.
Entré en crisis. No podía acercarme del asco (encima tan grande!!), me daba repugnancia y fantaseaba con que iba a salir algun cuerpo viviente de adentro. Pasaron horas y la problemática me afectaba fuerte. Cuando llegó el llanto y los nervios, y nadie podía venir a mi casa, colapsé. Estaba totalmente corrida. Aún así, me envalentoné y con guantes y broche en la nariz, tomé la olla de las manijas (sin destapar, OBBVIO!), abrí la puerta y la dejé en el pasillo del 1ero (Lucy vive en un primer piso) o más bien, en el medio del pasillo (lo más alejada de mi puerta así el olor no me llegaba)
Desinfecté todo. Me bañé, puse todo tipo de producto con fragancia. Todo volvía a su orden natural. Qué alivio. Sentía cómo se me volvía a estructurar la mente.
Fumé hierba, escuché musica, me serví una copa de Merlot y olvidé el tema. Erradicado el problema.
Esta mañana, salí temprano y ahí estaba la olla, la sopa y los cuerpos descompuestos. Bajé por las escaleras como escondiéndome de ellas. Y me fui.
Regresé alrededor de las 20 hs. Me crucé con gente que no conozco y subí. Una vez situada en el pasillo: Oh - Sorpresa - No estaba la Olla. Touch me Touch me Shisusss!! Great!
No se qué sucedió.
Cuentan en el edificio, que de las personas que viven en el mismo, hay una que carece de salud mental pero yo no se por qué lo dicen. De Lucy, no pueden sospechar...
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Llamado a la solidaridad: Quien sepa mucho sobre templates, sea amable y quiera ayudar a Lucy, tenga a bien mandarme un mail que necesito ayuda. Gracias. (espero mails a granel en mi bandeja)